Tómate tú tiempo, enciende velas, incienso si lo prefieres, respira tranquilamente.
¿Qué es lo que me da miedo?
...
¿De qué me siento culpable?
...
¿Por qué motivos me avergüenzo?
...
¿Qué me produce pena?
...
¿Qué mentiras me cuento a mi mismo?
...
Visualízalo y deja que se vaya, que fluya como río.
Si en tu río había mierda estancada, deja que marche.
Deja sitio para el agua cristalina y los peces que viven en ella.
Retener lo que no es beneficioso, ni siquiera es sensato.
Ahí van cinco de los siete… primeros.
Open your mind!
Pues yo también voy a hacer eso.. ¡Marchando cinco relatos sanadores!
ResponderEliminar